Esta carta constituye un manifiesto de voluntad; principalmente como líder. Existen diversos tipos de liderazgo y de líderes, definidos de acuerdo a cada autor y a cada contexto. En lo personal creo firmemente que un líder no es aquel que guía a una multitud, ni aquella persona que entra a una habitación y la ilumina con su personalidad y tampoco aquel que tiene carisma. Creo que un líder es aquel que es capaz de inspirar. A lo largo de la historia existieron líderes carismáticos que en realidad no tuvieron significativos de acuerdo a los puestos que ocupaban (John F. Kennedy, por ejemplo). Por lo tanto, quiero convertirme en un líder que inspire. En un líder proactivo capaz de implementar ideas, de inspirar a las personas a ser mejores seres humanos tanto para con ellos mismos como para los demás.
Me comprometo a ser un líder que inspire, me comprometo a no solo pensar en mis propios intereses; sino en los interés de asuntos más grandes que yo y la humanidad, como el medio ambiente. Me comprometo a vivir cada día, y cada aspecto de mi vida de acuerdo a los objetivos que me he trazado en lo personal y en lo profesional. Siendo el respeto hacia los demás y hacia mi misma la principal base de cada paso que de.
En el Karate – Do existe una frase que define la vida que debe seguir un seguidor de este arte: Jobo Kore Dojo, Gibi Kore Dojo; el significado literal de esta frase es: cada paso es Dojo, día a día es Dojo. Lo que implica que se debe vivir cada día y cada paso en la vida de acuerdo a los principios que se viven dentro del Dojo (lugar de entrenamiento): honor, respeto, humildad, trabajo, pasión, entrega y perseverancia. Lo que quiero decir, es que me comprometo a vivir cada parte y etapa de mi vida de acuerdo a este precepto.
Atte.
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